Para el día que dejes de quererme

No me sorprendería, sinceramente. Me dolerá, definitivamente, pero no me tomaría con la guardia baja. Si dejas de quererme, no habría problema, no pasaría gran cosa. Uno puede vivir queriendo a alguien que no le corresponde, no se muere uno de amor unilateral. Uno aprende a vivir amando a aquella otra persona hasta que… lentamente va uno olvidando o llega alguien más a ser el foco de atención, es algo normal, hasta sano, según la psicología. Si tú decides irte, no te reclamaría nada, al contrario, me sentiría bastante agradecida. A diferencia de muchos amores unilaterales, yo tuve la oportunidad de poder cobijarme en tus brazos. Pude bailar contigo, aunque no fluyera de la mejor manera. Pude probar los besos más dulces de la sonrisa más hermosa que se ha paseado por mi mejilla. Pude amanecer con el brillo de los ojos más hermosos que han existido en la tierra. Pude sentir el cosquilleo de dos pieles que entran en contacto sin ninguna barrera, pude sorber el dulce nectar de tu cuello, ...